El olfato es el único de los 5 sentidos que no duerme, permanece siempre atento. ¿Os habéis preguntado para qué?
Gracias a él recibimos una valiosa información que no es visible, no podemos tocarla pero si leerla, la leemos con el olfato. Hacerlo de una manera consciente requiere una única cosa, presencia.
A todos nos ha pasado que nos encanta el olor del ser amado, cada persona tiene su propio aroma, es genuino, único entre millones porque crea su propia alquimia.Â
Estos aromas que cada ser crea, bien sean plantas, animales o humanos, contiene la información que describe todo lo que ese quiere transmitir al universo.
Haciendo una comparación a modo de ejemplo, si la tinta es el aroma, el papel donde escribimos es el espacio, el movimiento del escritor al escribir es la vibración (información). Cuando lees un libro, las palabras tienen una carga energética, es el sentir del autor, es la transmisión de conocimiento, en este ejemplo hablamos del poder de la palabra, con el palo santo el poder es el aroma.
Con los aromas sucede lo mismo de un modo muchÃsimo más poderoso, recibes un paquete de información en tan sólo un instante. El motivo es la frecuencia de vibración. El palo santo pertenece a los aromas de alta vibración más poderosos que existen. Con tal poder que puede purificar un espacio muy cargado energéticamente con tan sólo ahumarlo.Â
Es buenÃsimo para limpiar nuestro cuerpo energético y para rituales de limpia o purificación, siendo efectivo incluso a distancia.
En aceite es muy bueno para aromaterapia, en ungüento para el dolor de huesos, en madera para armonizar espacios.
Es muy bonito el proceso que se realiza en su elaboración, tal vez el respeto con el que es tratado su hace que prevalezca su alta vibración en el tiempo.
Cuando el árbol muere naturalmente, es puesto al sol durante largo tiempo, asà es secado y cargado de sol. Y finalmente utilizado como medicina.
Gracias a la Madre Tierra por tan mágico tesoro.
En nuestra tienda mágica puedes encontrarlo